en camino

Hállome perdido, ánima troncha y quédome inerte.

Fijo resplandor tenue atraviésame y finiquita ilusión presente.


Encuéntrome idealizado, sin paciencia y con justa cólera.

Severa tesitura, día a día, machácame cual ave martillera.


Siéntome harto, propuesto al combate y sumo furibundo.

En unión y libertad, hoy o mañana, perecerá tu régimen trunco.